EMDR (Eye Movement Desensitization and Reprocessing) es un abordaje terapéutico para desensibilizar y reprocesar traumas psicológicos (trauma simple o complejo) de manera espontánea, no guiada.
Muchos síntomas y trastornos aparecen a raíz de experiencias traumáticas que suceden a lo largo de la vida: un accidente; separarse de los padres unos días cuando se es niño, sin estar preparado para ello; abortos; recibir humillaciones, críticas o abusos; perder a un ser querido, un hogar o un trabajo con un ambiente hostil; ser ingresado en hospitales; estar aislado socialmente; vivir con miedo a ser dañado o a dañar, con miedo a no ser suficiente o a decepcionar; presenciar catástrofes o verlas en televisión, escuchar malas noticias, etc.
El método fue creado en 1987 por la Dra. Francine Shapiro y ha sido desarrollado desde entonces por miles de terapeutas a escala internacional, con un impulso importante en España durante los últimos años.
Para que la aplicación de EMDR garantice su gran eficacia es fundamental que los terapeutas sean expertos también en psicoterapia y psicopatología, así como tener formación avanzada en apego y disociación.